A Tim Burton no le divierten las recreaciones de su estilo con IA: “Es como si un robot se llevara tu humanidad”








La Bella Durmiente aparecía con piel pálida, característica de Burton, con largos mechones rubios y puntos en las mejillas. Otros simplemente no estaban a la altura, y Peter Pan parecía más una película de Dreamworks de bajo presupuesto. De cualquier manera, la idea misma de utilizar la IA para imitar la creatividad de Burton dejó fríos a algunos usuarios que dejaron comentarios en el sitio.
“Finalmente estamos presenciando la muerte del arte y la cultura“, rezaba un comentario. “Bien hecho”. Otro señaló la falta de sustancia de estas creaciones de IA: “Como alguien que enseñó las películas y la estética de Tim Burton durante años, realmente esperaba algo hermoso aquí, pero la IA falló en esto”, dijeron. “Hay muy poco expresionismo alemán evidente en las líneas, curvas o luz de estas representaciones y, para mí, esa es una gran influencia en la estética de Burton; ni ves la influencia del cine negro y de las criaturas de los años 50”.
Burton no es el único director al que no le hace gracia que la inteligencia artificial recree su estilo. El director del Gran Hotel Budapest, Wes Anderson, que inspiró involuntariamente una tendencia viral de TikTok en el período previo a “Asteroid City”, dejó en claro recientemente que no se involucra con ningún arte generado por inteligencia artificial que intente imitarlo.
El estilo de Wes Anderson es un meme: por qué el director de ‘Asteroid City’ es la víctima perfecta de la inteligencia artificial
Jorge Loser | ESPINOF // Michael Cavna | The Washington Post

Wes Anderson se ha enterado de que las parodias de su estilo cinematográfico generadas por IA, están haciendo metástasis en Internet. Su respuesta durante una entrevista, desde Nueva York, es de irónica resignación.
“Pensé: ¡Dios mío!”. dice Anderson con una cálida carcajada. “Lo que me gustaría es tener algún tipo de abogado con inteligencia artificial que pudiera hacer algún algoritmo que hiciera que me pagaran por cada una de estas cosas de alguna manera. Ni siquiera el poder de la inteligencia artificial, creo, va a conseguir que me paguen por nada de esto”.
El estilo de Wes Anderson es tan reconocible que se ha convertido en un meme. Recientemente el director decía que no quería saber nada de sus imitadores en redes sociales, a raíz del estreno de ‘Asteroid City’ los fans han estado haciendo exactamente eso, imitar su impronta visual y generar tráilers para películas falsas de Anderson con la ayuda de Midjourney y otras aplicaciones de IA.
El mismo autor ha reconocido que siente que cualquier personaje de una de sus películas podría entrar en otra de ellas y estar allí como en casa, pero la tendencia ha formado una ola expansiva y ahora los usuarios de TikTok publican videos grabados con el estilo cinematográfico de su obra con una variación del eslogan y la leyenda: “Será mejor que no actúes como si estuvieras en una película de Wes Anderson”.


La tendencia comenzó en abril de 2023 y se popularizó cada vez más a lo largo del mes. El 10 de junio, The Times publicó una entrevista con Wes Anderson donde le preguntaron sobre ello, admitiendo que nunca ha visto ninguno de los vídeos y que solo ha oído hablar de ellos, diciendo:
“Soy muy bueno protegiéndome de ver todas esas cosas. Si alguien me envía algo así, lo borro de inmediato y le digo: ‘Por favor, lo siento, no me envíes cosas de gente imitándome’. Porque no quiero verlo pensando: ‘¿Es eso lo que hago? ¿Es eso lo que quiero decir?’ No quiero ver demasiado de otra persona pensando en lo que intento ser porque, Dios sabe, entonces podría empezar a hacerlo”.
Anderson no ve con tan buenos ojos las aplicaciones de IA generativa que han robado millones de imágenes sin permiso. Incluso mientras algunos artistas litigan contra esas empresas, las parodias generadas por IA de conocidos cineastas e ilustradores se reproducen día a día, cada vez más desvinculadas de la verdad del material original de creadores como Quentin Tarantino y Hayao Miyazaki, quien ha calificado toda animación generada por IA de “insulto a la vida misma”.
“Un artista o ilustrador tiene una mano particular que ha desarrollado y encuentra su conjunto de ideas, encuentra su voz”, dice Anderson. “Y no sé lo buena que es la IA para crear una voz. Una vez que se le ha dado una voz, puedes hacer lo que quieras con ella. Eso es un poco inquietante. Y da la sensación de que: ‘¿Puede ser legal’?”
De una broma a una ecosistema de reproducción automatizado
No es la primera vez que se parodia a Wes Anderson. La película de terror Wes Anderson de Saturday Night Live de hace cuatro años era una colección de detalles reconocibles de su cine, eso sí, realizado por actores, cierto presupuesto de producción y un tono cariñoso.
Sin embargo, su estilo se ha convertido en una víctima perfecta para herramientas de IA como Midjourney, algo que tuvo un origen en sus colegas de profesión: Anthony y Joe Russo.
La pareja, conocida por ser los directores de películas de los Vengadores y Marvel, imaginaron cómo se verían sus propias creaciones si Wes Anderson las hubiera dirigido y compartieron algunos de los resultados creados en Midjourney a través del usuario @digiguru con sus seguidores, con una versión retro de Iron Man que parece que se creó en los años 60, una versión de Black Panther al estilo de los años 40 y un Ant-Man de la época de la Guerra Fría.



A medida que las representaciones generativas de IA se filtraron en las redes sociales, la estética de Wes Anderson parece haber colonizado por completo las opciones de los experimentos con la generación de arte con Midjourney. En diciembre, los usuarios se volvieron virales en las redes sociales con una gran cantidad de imágenes que imaginaban películas desde Harry Potter, Alien hasta ‘El resplandor y ‘Gremlins’, dirigidas por Wes Anderson, hasta una serie de tráilers de películas clásicas (Star Wars, El señor de los anillos, etc.)
Aparte de lo ofensivo de que los fanáticos piensen que conocen el estilo de un director mejor que el propio director (o que piensen que se puede reducir tan fácilmente a viñetas de una esencia listas para la IA), es muy indicativo del momento, en el que las malas copias de los grandes se las considera un trabajo entretenido por sí mismo. Los conceptos particulares que se han vuelto virales, como el concepto de Wes Anderson y “Star Wars” llamado “The Galactic Menagerie” (impulsado enteramente por animación de IA, por supuesto) no podrían ser más obvios y aburridos.
El dilema ético de las IA
Es divertido ver el estilo cinematográfico de Anderson desplegado a través de diversas fronteras, pero la situación plantea diversos desafíos, algunos simplemente de hartazgo, como reducir a uno de los cineastas más significativos del cine estadounidense a una paleta de colores. Es fácil ver por qué se ha convertido en el favorito de los “artistas de IA”, ya que tiene un estilo visual muy reconocible que se puede deducir de una sola imagen fija. Tenemos una noción preconcebida de cómo se vería ‘Star Wars’ dirigida por Wes Anderson y lo que vomita Midjourney está lo suficientemente cerca como para reflejar la idea.
El problema viene cuando se trata de posicionar el “arte de IA” como el futuro, y usar el estilo de Anderson como bandera de este movimiento, que deja a la vista el reduccionismo de las herramientas de aprendizaje, de quienes las usan y quienes las consumen. Con una serie de composiciones simétricas, combinaciones de colores pastel, la fuente que le gusta usar, y detalles de diseño, reduce el trabajo a una parodia constante sin capacidad de entender ese estilo, lo que sugiere que todo lo que tiene que ofrecer un cineasta con 30 años de carrera es es un atractivo visual frívolo.
El dilema de la IA es que ayuda a simplificar la idea de una forma de entender el cine que ha sido filtrada por una experiencia y una inspiración emocional y heterogénea en las películas de Stanley Kubrick, Jacques Tati; Yasujirō Ozu, Satyajit Ray, Jean Renoir, Jean-Luc Godard, Francois Truffaut y Jacques Rivette, por nombrar solo algunos. Kubrick dijo una vez que un director de cine es una “máquina de saborear”, y eso es algo que da sentido a que el director utilice, por ejemplo, la simetría dentro del marco, quizás el elemento más obvio de fácil de replicar en los TikToks.
La razón de un estilo nunca se puede copiar
Con una devoción obsesiva por escenificar escenas en simetría, Anderson rompe la “regla de los tercios” para la composición visual. Por el contrario, fija a sus actores en el punto muerto, como se muestra en este videoensayo de Kogonada. Trabajando con su director de fotografía habitual, Robert Yeoman, Anderson utiliza composiciones planas para crear un “cine gráfico” que comparte una afinidad con la ilustración y la pintura, lo que le convierte en la presa fácil de la representación artificial. Su puesta en escena con la cámara permanece perpendicular y sus rápidos movimientos de la cámara planos, escenifica a sus actores a través del marco, aunque sea a diferentes profundidades.
Nunca sitúa la cámara en ángulos oblicuos dividiendo primer plano, plano medio y fondo, cerca de la forma en que vemos el mundo. Recuerda a estilos cinematográficos anticuados, desde la teatralidad del cine temprano, la proporción clásica de Hollywood de 4:3, hasta el cine pop-art de finales de la década de 1960. Su obsesiva y sistemática repetición de elecciones estilísticas a lo largo de su obra puede ser una caricatura, pero es sólida y muestra un interés por las formas obsoletas de los medios y el arte, como las revistas impresas y los tableaux vivant, pero todo ello tiene un componente emocional ausente en las IA.
Ideas de su cine como la insatisfacción creativa, las historias sobre la mayoría de edad, la fascinación por Jacques Cousteau, J.D. Salinger o Roald Dahl dialogan con su dirección de arte, y su atención por el detalle obsesiva. La escenificación tiene una lógica interna que resulta autocomplaciente, y eso es precisamente lo que la diferencia de una “IA”, que es una marca que no es inteligente, sino un algoritmo sofisticado, incapaz de dar propósito a sus decisiones creativas.
El algoritmo solo copia, no es subjetivo, dejando diseño artístico sin gusto, y con el único sentido de parodia superficial.
Tener a personajes que solo miran fijamente a la cámara es una aproximación muy torpe de la “expresión inexpresiva” de su cine, es una amalgama de ideas captadas por capturas estáticas, toda la pasión y la visión creativa de un ser humano, se convierte en plástico, en un chiste. Además, si SNL ya hizo una parodia, ¿no es el resto de tráilers y creación constante de arte de crossovers “como Wes Anderson” repetir el mismo chiste una y otra vez?
Lo que Midjourney le proporciona a las personas es la experiencia de volver a contar el mismo chiste, crear la ilusión de que puedes ser gracioso, cuando lo único que haces es regurgitar el trabajo de otros mecánicamente.